Jalisco es el tercer estado en el país, después de Ciudad de México y Estado de México, con el mayor número de fraudes contra empresas cometidos por suplantadores de identidad, comentó Fernando Paulin, director general del buró de fraude digital Trully.
Con base en su reporte «Una mirada al fraude 2023«, el buró de fraude digital detectó el modus operandi de los defraudadores seriales en México y encontró que un mismo defraudador aplica hasta 151 ocasiones en una misma empresa para obtener diferentes líneas de crédito.
«Hemos visto al mismo defraudador hasta en siete empresas diferentes; lo hemos visto hasta con 151 créditos en la misma empresa. Quiere decir que mi rostro lo pongo en 151 identificaciones, le saco 151 créditos a la empresa y afecta a 151 personas (a quienes le robó la identidad); y eso lo hace por siete empresas», dijo el director general de Trully.
Mencionó que dado el tamaño de la economía que tiene Jalisco y debido a que es un hub de innovación, las empresas más vulnerables a los fraudes en este estado son las que ofrecen servicios financieros, gambling (centros de juego), aseguradoras y empresas fintech que operan desde el estado, aunque, al igual que en todo el país, cualquier empresa que ofrece productos y servicios al consumidor final puede ser víctima de los defraudadores.
«Desde aseguradoras, por ejemplo, a las que van y les cobran seguros de vida; microprestamistas que dan préstamos de 800, de 1,000 pesos, de 1,500, que se han puesto muy de moda últimamente porque sacan del apuro al consumidor final…empresas de buy now pay later (compra ahora y paga después) que son aquellas que te ayudan a financiar tu compra sin necesidad de tener una tarjeta de crédito; casinos, claramente los bancos son muy afectados en este sentido», precisó Fernando Paulin.
«En nuestro reporte Una mirada al fraude del 2023, que encapsula todos los aprendizajes que nosotros tuvimos de cara a las empresas que nosotros servimos en México, nos dimos cuenta que Jalisco ocupa el tercer lugar en fraude de suplantación y el municipio que más afectan los defraudadores es en Zapopan», subrayó.
El mismo rostro
Al explicar el modus operandi de los defraudadores seriales en México, el director general de Trully refirió que los suplantadores de identidad presentan documentos falsos en los que cambian de nombre y dirección, crean correos electrónicos y números telefónicos diferentes, pero lo único que no cambian es su rostro, por lo que el buró digital permite a las empresas detectar si una persona ha solicitado antes un crédito con la misma cara pero con datos diferentes.
El buró cuenta con más de nueve millones de identidades que detecta a defraudadores previamente identificados por otras instituciones, y, a decir de Paulin, es la única aplicación en el país que ofrece el servicio garantizando la protección de datos personales.
«Las empresas de manera segura, confiable y en concordancia con la protección de datos personales, le es facilitado un medio a través del cual puede contrastar a sus aplicantes usuarios y preguntarse: ¿a este rostro ya lo has visto y siempre se ha llamado Fernando, o de pronto lo has visto como Pedro, como Luis o como Manuel?».
Protección de datos
De acuerdo con el director y cofundador del buró, existe garantía sobre la protección de datos personales.
«Nosotros, primero que nada, no almacenamos ningún dato sensible del cliente; nosotros disociamos los datos originales y trabajamos solo con datos numéricos que no son reversibles a su forma original y con ello podemos mantener la privacidad y anonimidad de los datos en todo momento, respetando siempre la privacidad de los consumidores en todo momento».
Pérdidas millonarias
Con base en el reporte 2023, las empresas en México pierden hasta tres veces más de lo que estiman por concepto de fraude; además, del total de clientes en cartera vencida, entre 20 y 30% son en realidad defraudadores.
«Las empresas creen que pierden el 1% en fraudes y planean subir las tasas de interés para recuperarlo pero eso afecta al cliente final; una vez que nosotros nos acercamos, les demostramos que el 1% que creían que estaban perdiendo, en realidad es el 3%; las empresas experimentan tres veces más fraude del que originalmente ellos prevén», puntualizó.